El Festival de Viña del Mar necesitaba anoche un golpe de energía. El humor, a cargo del trío chileno Manpoval, había despertado al Monstruo, que sacó sus garras para despedir con indiferencia feroz a los comediantes. Sin embargo, bastó que los boricuas RKM y Ken- Y pisaran el escenario de la Quinta Vergara para que se desatara la euforia colectiva.“Fue espectacular este encuentro. Fue una bendición haber tenido esta posibilidad de compartir nuestra música con el pueblo chileno, en esta tarima que ha recibido a las grandes glorias de la música latina”, manifestó Ken-Y a Primera Hora sobre el show de dos horas que cerró la cuarta jornada del festival.
“Gracias a Dios el público nos recibió con mucho cariño, pasamos la prueba, ya que era un reto para RKM estar en el 50 aniversario de Viña del Mar. Pero salimos victoriosos, hicimos nuestro trabajo y el propósito se cumplió: llevarle buena música a toda esta gente linda”, comentó emocionado RKM en el camerino.
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Los boricuas supieron conquistar al Monstruo. Se bendijeron mutuamente, le dedicaron el show a Jesucristo, jugaron con la soltería de Ken- Y, y hasta se dieron tiempo para regalar flores rojas a sus miles de fans. Sencillamente, maestros de la conquista. Los dos en su estilo: RKM, de negro furioso; y Ken -Y, de blanco virginal.
Sobre el escenario la fiesta era total. Para ello apelaron a sus grandes éxitos como “Dame lo que quiero”, “Si tú me amaras”, “Igual que ayer”, “Yo te motivé mejor que él”, “Quizás”, “ Te regalo amores”, “Down”, entre otros, con los cuales se ganaron todos los premios reservados para los grandes artistas: Antorcha de Plata, Antorcha de Oro y Gaviota de Plata.
“Sentimos la euforia del público chileno, desde el principio hasta el final del show. En todo momento estuvimos interactuando con el público, la gente pidió más y más y nosotros le dimos lo que querían”, aseguró un sonriente RKM.
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