Miguelito no desea ser un artista incompleto y, para no quedarse atrás, está aprendiendo a tocar el piano de la mano del músico y cantante Bonny Cepeda, a quien quiere como si fuera su tío biológico.
Hace alrededor de dos semanas que Miguelito ha iniciado las clases de piano con Cepeda, quien con mucha paciencia está enseñando al raperito el solfeo.
Miguelito, que tiene nueve años de edad, expresa que lo más que le gusta de sus clases de piano es la sinceridad de su maestro.
El pequeño, quien sabe la importancia de ser polifacético como artista, indica que “me gusta ir a su casa, tomar las clases y compartir con él. Al tocar el piano me creo que estoy en el escenario”.
“Un artista nunca es perfecto. La práctica da la perfección”, acota
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El objetivo de Bonny, así como el deseo de Miguelito, es que en el futuro el niño sea un cantante completo, que lea música y que toque varios instrumentos.
Para eso Miguelito también toma clases de guitarra, las que inició en su escuela Tasis en Dorado, donde también se pule en el inglés al ser la educación bilingüe.
“Yo soy un tío postizo de él y soy parte de esta familia. Yo dirigí el grupo Teen Divas en el que cantaba una de sus hermanas”, dice el intérprete.
Sorprendido con la inteligencia y madurez del reguetonero, Bonny Cepeda agrega que “la pasión de Miguelito por la música es increíble. Cuando él quiere algo, o se propone una meta, es algo grande e importante y lo hace”.
“Él sabe ser un niño. Es un niño prodigio tocado por Dios que cada ciertas décadas sale. Él tiene la preparación a nivel académico. Es un buen alumno. A pesar de la familiaridad (y confianza) me le pongo fuerte”, dice.
Bonny Cepeda asegura que “me llena de orgullo porque he visto el crecimiento de este niño. Me veo un poco en él porque logra lo que quiere con tesón. Yo viví en una época de precariedad, a diferencia de él que tiene todo los recursos y lo tecnológico.”
“Él va a ser ejemplo para otros niños y van a ser tocados por él”, manifiesta
Hace alrededor de dos semanas que Miguelito ha iniciado las clases de piano con Cepeda, quien con mucha paciencia está enseñando al raperito el solfeo.
Miguelito, que tiene nueve años de edad, expresa que lo más que le gusta de sus clases de piano es la sinceridad de su maestro.
El pequeño, quien sabe la importancia de ser polifacético como artista, indica que “me gusta ir a su casa, tomar las clases y compartir con él. Al tocar el piano me creo que estoy en el escenario”.
“Un artista nunca es perfecto. La práctica da la perfección”, acota
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El objetivo de Bonny, así como el deseo de Miguelito, es que en el futuro el niño sea un cantante completo, que lea música y que toque varios instrumentos.
Para eso Miguelito también toma clases de guitarra, las que inició en su escuela Tasis en Dorado, donde también se pule en el inglés al ser la educación bilingüe.
“Yo soy un tío postizo de él y soy parte de esta familia. Yo dirigí el grupo Teen Divas en el que cantaba una de sus hermanas”, dice el intérprete.
Sorprendido con la inteligencia y madurez del reguetonero, Bonny Cepeda agrega que “la pasión de Miguelito por la música es increíble. Cuando él quiere algo, o se propone una meta, es algo grande e importante y lo hace”.
“Él sabe ser un niño. Es un niño prodigio tocado por Dios que cada ciertas décadas sale. Él tiene la preparación a nivel académico. Es un buen alumno. A pesar de la familiaridad (y confianza) me le pongo fuerte”, dice.
Bonny Cepeda asegura que “me llena de orgullo porque he visto el crecimiento de este niño. Me veo un poco en él porque logra lo que quiere con tesón. Yo viví en una época de precariedad, a diferencia de él que tiene todo los recursos y lo tecnológico.”
“Él va a ser ejemplo para otros niños y van a ser tocados por él”, manifiesta
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