Una pantalla gigante y tres tarimas que lo iluminaban, pasaban imágenes o servían para que el rey del reggaeton se desplazara o alguno de sus diez bailarines hicieran una coreografía y conformaron el llamativo escenario, en donde hubo humo, fuego y también fuegos artificiales.
La música así como las palabras de El Cangri fueron ley a lo largo de la noche y la gente no sólo se movió, vaciló y gozó con alegría al ritmo de "Lo que pasó, pasó", "Tu príncipe", "Machucando", "Mayor que yo", "Noche de entierro" y "Gasolina", sino que también fue cómplice del boricua a la hora de armar ambiente levantando sus celulares, alzando sus manos y hasta armando una ola cada que él los invitaba a hacerlo.
Acompañado en los coros por Falo y en la mezcla por DJ Candy, Daddy Yankee hizo un recorrido por sus éxitos, así como también por algunos temas de su nuevo material, El Cartel: The Big Boss.
Mexicanos, puertorriqueños, dominicanos, salvadoreños y colombianos se hicieron presentes a través de los gritos con los que respondían a los saludos del boricua, que haciendo gala de sus dotes de improvisación sorprendió con un poco de free stlye.
Los que pensaron que el reggaeton era sólo para los jóvenes no contaron con que también familias enteras se dejarían llevar por la oportunidad de ver a Yankee en acción, que dio cátedra de ser un showman, y fue así como desde el área abierta en que se colocó frente al escenario, como hasta las últimas filas, hubo desde niños hasta adultos que gozaron el concierto del boricua que por primera vez se presentó en vivo en el área.
Tras un show de de una hora y media y alrededor de 25 canciones, Daddy Yankee se despidió al ritmo de su más reciente éxito "Impacto", en donde estuvo acompañado por su grupo de bailarines que para este tema en especial lucieron atuendos futurísticos. El grito de los reggaetoneros se hizo escuchar la noche del domingo en el Nokia Theatre, donde Daddy Yankee hizo de las suyas en una velada en la cual el público se le entregó por completo en su presentación como parte de su gira mundial llamada "El Cartel: The Big Boss".
No apreció por los aires, como lo hizo en el arranque de su gira en Puerto Rico, pero ese no fue impedimento para que el público lo recibiera con una ovación de pie al verlo salir caminando por una de las tarimas.
Vestido de jens, playera, gorro de beisbol, tenis y obviamente cargado de bling bling, El Cangri apareció a eso de las 8:18 p.m.
La música así como las palabras de El Cangri fueron ley a lo largo de la noche y la gente no sólo se movió, vaciló y gozó con alegría al ritmo de "Lo que pasó, pasó", "Tu príncipe", "Machucando", "Mayor que yo", "Noche de entierro" y "Gasolina", sino que también fue cómplice del boricua a la hora de armar ambiente levantando sus celulares, alzando sus manos y hasta armando una ola cada que él los invitaba a hacerlo.
Acompañado en los coros por Falo y en la mezcla por DJ Candy, Daddy Yankee hizo un recorrido por sus éxitos, así como también por algunos temas de su nuevo material, El Cartel: The Big Boss.
Mexicanos, puertorriqueños, dominicanos, salvadoreños y colombianos se hicieron presentes a través de los gritos con los que respondían a los saludos del boricua, que haciendo gala de sus dotes de improvisación sorprendió con un poco de free stlye.
Los que pensaron que el reggaeton era sólo para los jóvenes no contaron con que también familias enteras se dejarían llevar por la oportunidad de ver a Yankee en acción, que dio cátedra de ser un showman, y fue así como desde el área abierta en que se colocó frente al escenario, como hasta las últimas filas, hubo desde niños hasta adultos que gozaron el concierto del boricua que por primera vez se presentó en vivo en el área.
Tras un show de de una hora y media y alrededor de 25 canciones, Daddy Yankee se despidió al ritmo de su más reciente éxito "Impacto", en donde estuvo acompañado por su grupo de bailarines que para este tema en especial lucieron atuendos futurísticos. El grito de los reggaetoneros se hizo escuchar la noche del domingo en el Nokia Theatre, donde Daddy Yankee hizo de las suyas en una velada en la cual el público se le entregó por completo en su presentación como parte de su gira mundial llamada "El Cartel: The Big Boss".
No apreció por los aires, como lo hizo en el arranque de su gira en Puerto Rico, pero ese no fue impedimento para que el público lo recibiera con una ovación de pie al verlo salir caminando por una de las tarimas.
Vestido de jens, playera, gorro de beisbol, tenis y obviamente cargado de bling bling, El Cangri apareció a eso de las 8:18 p.m.
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