"Totalmente", dijo Daddy Yankee (Ramón Ayala) a RUMBO por teléfono desde Miami. "Es una [gran] satisfacción".
El género explotó en 2004, cuando 'Gasolina' (incluida en Barrio Fino) convirtió a Daddy Yankee en la persona más poderosa de la industria de la música latina.
"Me he convertido en empresario", afirmó. "Dije: 'Ok, ¿quieren ver bizcocho? Entonces vamos a negociar bien'".
En tres años como empresario no le ha ido tan mal. Además de tener su propio sello discográfico (La Calle Records), es portavoz de Pepsi, tiene su propia línea de calzado deportivo con Reebok (Daddy Yankee by RBK) y una línea de ropa (DY). En radio, ya cumplió un año el programa Daddy Yankee on fuego Radio (que se transmite por 29 afiliadas a ABC Radio Networks) y a fines de 2007 debuta en el cine, en el papel principal de la película Talento de barrio (Paramount Pictures).
Pero la mayor parte de su carrera la pasó solo y aprendiendo en el camino.
"Siempre fui independiente y uno sigue aprendiendo del negocio, especialmente con la era digital", dijo. "Nosotros creamos nuestro propio mercadeo y subcultura. O nos volvíamos empresarios o no íbamos a ningún lado".
Pero la industria descubrió que capitalizar con el éxito del reggaetón iba a ser —por lo menos al principio— más difícil de lo esperado: las canciones del reggaetón no tenían un autor claro y parecía que todos, desde el amiguito de enfrente hasta la abuelita del sonidista, habían metido mano.
"El disco que cambió todo el juego fue Barrio Fino", dijo Daddy. "Después de unos millones de copias vendidas ya se profesionalizó todo el género. Yo mismo desconocía todo lo relacionado con publishing y regalías, pero ahora ya aprendimos todos".
Y parece que ahora quiere organizarse en términos musicales. El Cartel: The Big Boss, que salió el 5 de junio, es su primer disco de estudio en tres años.
"Quiero llevar al reggaetón a otro nivel, tomar riesgos musicales que nadie quiere tomar", dijo Daddy. "Trabajé con productores de diferentes países, tomando las influencias de cada país y dándole un toque urbano a cada cultura. Dejamos el sonido clásico para los fanáticos, pero hay mucho reggaetón progresivo para seguir evolucionando".
Eso de que "nadie se anima" a hacer cosas nuevas es relativo, le digo. ¿Y **** Calderón, Voltio y Calle 13, que hace rato vienen dictando cátedra en la materia?
"Sí, pero somos muy pocos", explicó. "Sería bueno que fuera un batallón completo en lugar de pocos soldados".
El inmenso éxito de 'Gasolina' fue, simultáneamente, un impulso y un freno.
"Es que necesitas tu espacio como compositor, por eso estuve un año y medio fuera del panorama, y el reggaetón sintió un vacío", dijo. "Se preguntaban: '¿qué pasó con el reggaetón?'. Era que el líder estuvo un año y medio en el laboratorio. Entonces volví a mis raíces: todavía tengo el apartamento de mi barrio en Villa Kennedy [Puerto Rico], volví al mismo environment y fluyó la creatividad nuevamente".
Menos mal: la va a necesitar, por lo menos para evitar lo que sucedió el 2 de noviembre pasado en la entrega del Grammy Latino en Nueva York, cuando Calle 13 se llevó todo y dejó sin nada a Daddy Yankee, Ivy Queen y Wisin & Yandel. Pero, ¿es cierto que se levantaron de sus asientos y se fueron en señal de protesta?
"No, porque ni siquiera pude estar [en la ceremonia]", dijo DY. "Estaba en Nueva York, pero en el estudio. Ah, el chisme ése…".
De acuerdo, él no estaba, pero Ivy Queen y los demás sí. ¿Es cierto o no es cierto que se fueron?
"Sí, sí… tengo entendido que…" y, de repente, Daddy recapacita y cuida el discurso, no sea que ofenda a sus amigos. "Tú me entiendes… Como no estaba ahí, no te puedo asegurar si sucedió o no".
Pero si hubiese estado ahí, ¿se iba?
"No. Incluso cuando Calle 13 ganó, la primera llamada que recibió fue la mía, y ellos lo dijeron públicamente".
Al menos en los papeles, DY parece tener municiones como para lograr otra nominación al Grammy con su nuevo disco.
"La [canción] preferida mía es 'El Jefe', una marcha con tambores chilenos y otras cosas interesantes", dijo DY. "El segundo track, 'Who's Your Daddy?', es un reggaetón progresivo, bien rápido, grabado junto con Will.i.am [de los Black Eyed Peas]. 'Coraza divina' es hip-hop tropical, muy refrescante para el alma. 'Me quedaría' trata sobre la inmigración, con influencia de música afrocubana".
Un reflejo de sus gustos musicales eclécticos, que van de Juan Luis Guerra al hip-hop. Pero su gran escuela es la salsera.
"Willie Colón es mi pana [amigo] y uno de mis ídolos", dijo. "Él y Héctor Lavoe son mi escuela favorita. Incluso, mucho de mi imagen tiene que ver con Willie: seguro, confiado. Así soy yo y siempre me identifiqué con él".
Siempre, excepto en temas políticos: Willie quiere la independencia total de Puerto Rico.
"Mi posición personal [con respecto al estatus político de Puerto Rico] es que me gusta estar como estamos. Me encanta poder viajar a cualquier parte con todos los privilegios. He estado en varios países y todos me dicen que hemos sido bendecidos por eso".
Y fueron esos viajes los que le permitieron a DY sumarse a la creciente legión de reguetoneros que, no conformes con el éxito comercial, ahora quieren ganar credibilidad artística. "El reggaetón salió de la calle, no de un conservatorio", dijo. "Ahora nosotros le estamos integrando nuevos elementos y al pueblo le gusta ese sonido. Y, te lo aseguro, si es del pueblo, es muy difícil que lo paren".
Después de que las grandes disqueras le dieran la espalda al reggaetón durante más de 10 años, debe ser lindo ver a los señores de traje y corbata arrastrándose por el piso con tal de quedarse con un pedazo del pastel, ¿no?
0 Dejar Comentario:
Publicar un comentario