"Me encanta estar con mi gente", dijo Lisa Cordani, del barrio de Queens. "Vengo aquí desde que era niña".
Martin, designado rey del desfile, y el alcalde Michael Bloomberg cortaron la cinta ceremonial antes de subir a una carroza que promovía la Fundación Ricky Martin, que aboga por el bienestar de la infancia en el mundo.
Fanáticas gritaron al pasar la carroza por la avenida. "Nosotras estábamos a punto de desmayarnos de lo felices que estábamos de verlo", dijo Tania Ochoteco, de 33 años.
También provocó júbilo la presencia inesperada de Marc Anthony y Jennifer López, grandes mariscales del desfile en años anteriores y que esta vez participaron en carrozas por separado.
El gobernador de Nueva York, Eliot Spitzer, y su colega puertorriqueño Aníbal Acevedo Vila se sumaron a Bloomberg en la carroza principal. El senador Charles Schumer, con un megáfono, llamó en español a la muchedumbre a agitar sus banderas puertorriqueñas.
"Pienso que lo más impresionante es que a la gente le encanta vivir aquí y ser parte de Nueva York y ser neoyorquinos, pero al mismo tiempo están muy orgullosos de su herencia, de dónde vienen", dijo Bloomberg. "Y eso es lo que vuelve singular a este país".
Hubo bandas musicales, reinas de belleza y trabajadores municipales uniformados bailando al son de salsa que brotaba de los altavoces de las carrozas.
El animador televisivo Geraldo Rivera llevaba una bandera en una mano y un micrófono en la otra.
Un contingente de Ponce, la segunda ciudad en importancia en Puerto Rico, desfiló en ropas carnavaleras típicas llamadas vejigantes.
"Estamos muy emocionados", dijo Sarai Rivera, que se quitó su máscara de papel maché por un momento para decir que había viajado desde Ponce para asistir al desfile por primera vez.
Mickey y Minnie Mouse hicieron el viaje desde Orlando, Florida, para desfilar en una carroza que anunciaba Walt Disney World como un lugar para fiestas de quinceañeras.
Aunque fue imposible obtener un estimado de la concurrencia, centenares de miles de personas han asistido en años recientes.
Unos 2,1 millones de hispanos viven en Nueva York, y los puertorriqueños son la mayoría, con aproximadamente 789.000, de acuerdo a datos municipales.
La idea del desfile comenzó a inicios de los años cincuenta como una fiesta latina, pero más tarde se convirtió en un desfile puertorriqueño. Vibrante de música y color, la Quinta Avenida neoyorquina fue escenario del desfile anual puertorriqueño, que este año en su 50ma edición tuvo como rey al astro pop Ricky Martin, y además contó con la presencia de Marc Anthony y Jennifer López.
Decenas de miles de personas atestaron las aceras de la famosa arteria
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